La Prevención

Llega el calor

Los termómetros ambientales van subiendo los grados. Es el momento en que profesionales sanitarios, medios de comunicación e instituciones difunden campañas para poder enfrentarse con más seguridad a la llegada del calor.

Hay una serie de acciones preventivas, que si se incorporan como hábito cotidiano, servirán para minimizar los daños sobre la salud de las personas, por los efectos del calor extremo. A más elevada sea la temperatura ambiental, más importancia tiene la toma de estas medidas por parte de las familias.

  • Beber agua frecuentemente, recordándolo de forma especial con los niños.
  • Las bebidas isotónicas, que consumen los deportistas, son eficaces, ya que las sales que llevan reponen las pérdidas ocasionadas a través del sudor.
  • Refrescarse cada vez que se precise.
  • Permanecer el mayor tiempo posible en lugares frescos, procurando buscar las zonas con sombra o lugares que estén refrigerados (zonas comerciales, cines,…).
  • Por supuesto, protegerse de la exposición directa al sol (cabeza, piel,…). Si hay que estar al aire libre es conveniente utilizar sombreros, gorras o sombrillas. No olvidar las gafas de sol.
  • Cerrar puertas y ventanas en casa cuando el sol incida directamente sobre ellas (toldos…).
    Por la noche se puede refrescar la casa abriendo las ventanas.
  • Evitar realizar ejercicio físico en las horas centrales del día; eso incluye la práctica deportiva.
  • Usar ropa ligera, de colores claros, que deje transpirar y no sea ajustada.
  • Evitar las comidas calientes y copiosas, así como el consumo de bebidas alcohólicas. Mejor pensar en comer a base de ensaladas, verduras y fruta frescas.
  • Tener precaución y no dejar a los niños en el interior de coches aparcados.

La exposición solar en la temporada veraniega se debe realizar de forma gradual, aumentando poco a poco el tiempo que se está al sol.

 

Dr. Antonio Redondo Romero
Pediatra – Alicante
Hospital Vithas Medimar Internacional