Enfermedades

La fiebre

La RAE define la fiebre como un fenómeno patológico que se manifiesta por elevación de la temperatura normal del cuerpo y mayor frecuencia del pulso y la respiración.

Se considera como un mecanismo defensivo del organismo para luchar contra una infección. Así que la fiebre es una reacción del cuerpo, no una enfermedad.

La febrícula se reconoce como una elevación moderada de la temperatura axilar, y que es inferior a 38ºC.  

 

¿Cómo se toma la temperatura?       

Cuando se busca conocer la temperatura de una persona con fiabilidad, hay que utilizar un termómetro; no son muy objetivos los métodos tradicionales de tocar la frente con la palma de la mano o con los labios. 

 

¿Qué termómetro utilizar?    

Termómetro a utilizar con niños      

                                                               

  ¿Dónde tomar la temperatura?

  • Rectal
    • lugar más fiable e menores de 2 años
    • marca de 05-1º C más que la axilar, que es la referencia.
  • Axilar:
    • Utilizar en mayores de 2 años.
    • Cuando vemos que marca menos de 38ª C, está afebril, o sea no tiene fiebre,
    • Se considera fiebre, cuando marca más de 38º C.
    • Se habla de febrícula, cuando está entre 37 y 38º C.

 

¿Siempre se tiene que tratar la fiebre?

  • No.                                                                                                                                        
  • Si es inferior: el objetivo es aliviar el malestar y no luchar por quitar la fiebre por completo la fiebre.
  • Si la temperatura es superior a 38,5ºC, si es conveniente tratarla.      

                                                                                               

  

¿Qué hacer con un niño con  fiebre? 

  • Un menor de 3 meses: llevar urgente al pediatra.
  • Si tiene menos de 38,5ºC:
    • Medidas físicas:
      • No abrigarle; quitar ropa sin que llegue a tener frío.
        • Ventilar la habitación. 
          • Dar un baño de agua tibia y aplicar compresas de agua fría en la frente.
            • Ofrecer agua para mantener bien la hidratación.
              • Si no hay síntomas de alarma, saber esperar.
  • Si tiene más de 38,5ºC: dar antitérmicos:
    • 1º PARACETAMOL: a cualquier edad. Se puede dar cada 4-6-8 horas.
    • 2º IBUPROFENO: a partir de los 6 meses. Se puede dar cada 6-8 horas.
      • Al ser antiinflamatorio, más precaución por sus efectos secundarios. 
        • Administrarlo después de comer algo; nunca en ayunas.
          • Evitar si hay vómitos.
    • En principio, no alternarlos.
    • Si vomita el antitérmico: volver a dar si han pasado más de 15-20 min, o  administrar un supositorio por vía rectal.                                                       

  

 

¿Qué más cosas hay que tener en cuenta?

  • El niño febril no tiene apetito. Es lógico y hasta conveniente. Se le debe ofrecer su alimentación habitual, y si toma poca cantidad se le ofrece con más frecuencia, y rica en líquidos.
  • Si el niño vomita, ofrecer agua a cucharaditas, sin forzar.
  • La habitación donde está el niño febril se debe ventilar dos veces al día
  • Hay que mantener esa habitación a una temperatura uniforme. alejándolo de cualquier fuente de calor (radiador, estufa, …).
  • Al niño febril es conveniente refrescarle. Puede ser útil puede darle un baño o una fricción suave con una esponja empapada en agua tibia por todo el cuerpo (sin utilizar alcohol, ni colonias). Se pueden colocar unas compresas de agua fría sobre la cabeza. Luego se secará vaporosamente, sin frotar, y se le cambia de ropa.
  • Todas estas medidas deben ser utilizadas con precaución, evitando los cambios bruscos de temperatura, intentando que el descenso de la misma sea gradual. 

                                  

¿Cuándo llevar a un niño con fiebre a consulta?

¿Cuándo llevar a un niño con fiebre a consulta?

 

Fiebre y síntomas de alarma

Fiebre y síntomas de alarma

 

 

 

 

 

 

Dr. Antonio Redondo Romero
Pediatra – Alicante
Hospital Vithas Medimar Internacional